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Técnicas de Grabación de Batería con un solo Micrófono
- Creado en Domingo, 07 Junio 2020 05:50
- Escrito por Santiago Granados
En días pasados fue publicado un interesante artículo sobre la técnica de grabación de baterías creada por Glyn Johns, con la cual se puede lograr un completo y balanceado sonido del instrumento usando solo 4 microfonos. Sin embargo, éste no es el único método para obtener increíbles resultados con pocos recursos. En este artículo se presentarán las técnicas de grabación de baterías donde usando un (1) solo micrófono es posible capturar todo el set.
Más allá de la posibilidad de obtener buenos resultados con pocos recursos usando estas técnicas de grabación, capturar un set de batería utilizando un solo micrófono tiene ventajas técnicas que las convierten en importantes opciones a considerar, a la hora de entrar al estudio.
En primer lugar, el uso de un solo micrófono para capturar una batería elimina por completo los problemas de fase que pueden aparecer al usar otras técnicas. De igual manera, estos métodos de captura permiten obtener un sonido “natural” del instrumento, pues lo interpreta como una fuente única a pesar de que está compuesto por varios elementos sonoros.
El reto al implementar estas técnicas es obtener un sonido balanceado donde sea posible escuchar todos los elementos del set. Sin embargo, al usar un solo micrófono, éste proceso de balance se reducirá a modificar ubicación, inclinación y altura del mismo, y no será necesitará modificar niveles o panorámicas en la mesa simplificando el proceso. De hecho, es justamente la ubicación del micrófono en el set, lo que diferencia a las técnicas existentes de captura de este tipo.
Al final de este artículo encontrará un video desarrollado por Diffusion Magazine, Boutique Pro Audio y Mountain Grooves, en el cual podrá apreciar la demostración de las siguientes técnicas de grabación.
Técnica 1: Tchad Blake 
Tchad Blake es un productor e ingeniero de sonido estadounidense que ha trabajado con numerosos artistas, incluyendo a Arctic Monkeys, Elvis Costello, Peter Gabriel, Pearl Jam, The Black Keys, U2 y más. Blake es reconocido por sus originales y creativas texturas sonoras (incluyendo elementos inusuales como tubos de madera, latas de metal y cajas de cartón), de igual manera por incluir en sus mezclas diferentes elementos creativos como procesos de distorsión en baterías e incluso por sus técnicas de grabación binaural que hacen de su sonido algo único.
Para ejecutar su técnica, se sugiere utilizar un micrófono que brinde un suave o delicado top end, no hay un consenso respecto al patrón polar indicado aunque se suele sugerir que sea de tipo cardioide. Éste debe ser ubicado entre el bombo y el tom de piso (frente a la rodilla derecha del baterista), justo debajo de la posición natural del ride, y la cápsula debe apuntar al redoblante. Una vez posicionado, se escucha la captura y se debe buscar un balance correcto entre los toms y el bombo, si no se percibe dicho balance es necesario girar el micrófono algunos grados hasta obtener el sonido deseado.
Técnica 2: Wurst
La técnica Wurst ha sido masificada por el ingeniero y productor alemán Moses Schneider, quien ha trabajado con artistas como Pixies, Nick Cave, entre otros, siendo uno de los ingenieros más reconocidos de la industria alemana. Moses propone usar un micrófono de patrón cardioide ubicado en el punto denominado ‘sweetspot’, que suele ser encima del bombo y en medio de los dos toms (aire y piso) apuntando al redoblante. En este punto, se debe buscar que la distancia sea la misma entre la cápsula y cada elemento de la batería.
La equidistancia entre el micrófono y los elementos, garantiza que todos sean percibidos con una intensidad similar, manteniendo las diferencias de nivel que son naturales a cada elemento. Una vez posicionado el micrófono, se escucha el resultado y se acerca el micrófono a los elementos que carecen de nivel o se aleja de los que están más presentes.
Técnica 3: Heart
La técnica heart, como su nombre lo indica, se basa en ubicar el micrófono en el ‘corazón’ del set. Para implementarla se requiere un micrófono omnidireccional el cual debe ser ubicado entre 10 y 15 centímetros arriba del aro interno del bombo, en línea con el pedal y a un costado del redoblante, caja o tarola. El patrón polar del micrófono combinado con su ubicación, garantiza que la cápsula reciba información balanceada de todo el set y al estar a una corta distancia de los elementos permite grabar una batería definida.
Usando esta técnica, los elementos que se capturan con mayor definición son el bombo, el redoblante y los toms por su cercanía con la cápsula. Del mismo modo, los platillos al estar más lejos del micrófono, serán capturados con un nivel moderado pero balanceado sin ser estridentes.
Técnica 4: Técnica de hombro
Esta técnica busca capturar el sonido de la batería desde la perspectiva del músico. Para ello, es necesario ubicar el micrófono junto al hombro derecho de este. Dicha posición permite obtener un sonido equivalente a la manera como el oído del intérprete lo percibe.
Para implementar esta técnica se sugiere utilizar un micrófono de patrón cardioide para cancelar en la medida de lo posible las reflexiones de la sala. Este micrófono debe estar angulado apuntando al punto medio entre el bombo y redoblante, caja o tarola. De esta manera es posible capturar transientes claras de estos elementos y la inclinación del micrófono hará que los platillos se perciban a un nivel moderado aunque estén a la misma altura.
Técnica 5: IFK (In front of kit)
Esta técnica consiste en el uso de un micrófono ubicado frente al kit de batería con el fin de capturar el sonido del instrumento desde la perspectiva de un oyente que ve hacia el set. Para la aplicación de esta técnica, se debe posicionar el micrófono inicialmente unos 20 centímetros frente al bombo a una altura aproximada de 1 metro (frente a los toms de aire), y con una leve inclinación hacia abajo buscando que la cápsula mire el aro interior del bombo. A partir de este punto se sugiere empezar a variar la altura y lejanía respecto al set hasta que se obtenga el balance deseado.
Se sugiere para esta técnica usar micrófonos de cinta o listón, pues el patrón polar figura de 8 permitirá representar cómo un oyente en esa posición escucharía el set incluyendo las reflexiones de la sala, además de poder jugar con el efecto de proximidad para obtener el balance deseado. De igual manera a pesar de tener una ubicación en altura similar a la de los platillos, la inclinación y las propiedades de la cinta o listón permiten obtener un nivel controlado y un sonido sutil de éstos. Esta técnica garantiza unas transientes definidas del bombo y los toms por la cercanía del micrófono, sin embargo el sonido del redoblante será menos definido así como el del hi hat. En el video adjunto, se demuestra la diferencia de esta técnica al usar micrófono con patrón polar cardioide y figura de 8.
Técnica 6: Dick mic
Esta técnica fue bautizada y popularizada por la productora e ingeniera estadounidense Sylvia Massy, quien ha trabajado con reconocidos artistas como Tool, System of a Down, Johnny Cash, Red Hot Chilli Peppers, entre muchos otros. Consiste en ubicar el micrófono unos 20 centímetros arriba del aro interno del bombo, en línea con el pedal, y su cápsula debe estar apuntando a la entrepierna del baterista.
Para implementar esta técnica, se sugiere utilizar un micrófono cardioide de diafragma pequeño, buscando capturar transientes definidas. La inclinación de la cápsula permite balancear el sonido del set, pues la zona de rechazo del patrón, que apunta a los toms, controlará el nivel de captura de estos elementos a pesar de su cercanía. En muchos casos, se suele usar esta técnica de captura como un elemento adicional a la técnica ‘close mic’ incluso agregando procesos como compresión o distorsión a la señal de este micrófono con el fin de acoplar o ‘afincar’’ el sonido del instrumento.
Técnica 7: Corner mic
Para implementar esta técnica, no solo se requiere posicionar el micrófono sino también la batería, pues esta debe ser ubicada en una esquina del cuarto donde se graba de manera tal que el intérprete le de la espalda a la intersección de las dos paredes. Una vez ubicado el instrumento, el micrófono debe ser posicionado justo encima de la cabeza del baterista aproximadamente a una altura de 1.8 metros. Además, la cápsula debe estar inclinada unos 30º de manera tal que mire hacia el centro del set. Es importante que el micrófono no esté a menos de 50 centímetros de alguna de las paredes o el techo.
Esta técnica sugiere usar un micrófono de patrón cardioide de manera tal que se rechace la mayoría de reflexiones provenientes de las paredes próximas, en cambio se capturen las que provengan del resto de la sala. De igual manera, permite capturar un sonido unificado del instrumento, de manera que todos los elementos estarán presentes aunque no con mucha definición. Sin embargo, permite plasmar la esencia de la batería y la interacción con el entorno en el que se graba.
Técnica 8: Zenith
La técnica Zenith es quizá una de las menos convencionales de la lista. Esta consiste en utilizar un micrófono de tipo shotgun ubicado como un overhead mono directamente sobre la batería. Los micrófonos shotgun se utilizan comúnmente para la captura de sonido directo en audiovisuales por su alta directividad, y es justamente esta característica lo que lo convierte en una opción interesante para capturar una batería pues elimina fácilmente las reflexiones de la sala.
Estos micrófonos poseen una respuesta en frecuencia limitada y la lejanía del bombo no permite capturar un buen low-end. No obstante, las grabaciones realizadas con esta técnica otorgan un tono único que es muy atractivo para muchos ingenieros.
Bonus: Floor mic
A pesar de que esta no es una técnica de captura de batería en sí, es un gran complemento a cualquier método de grabación. Consiste en ubicar un micrófono con patrón omnidireccional aproximadamente 2 metros frente a la batería y alineado con el centro del kick a unos escasos 5 centímetros del suelo o sobre el mismo.
Este método permite capturar un sonido unificado de la batería con una significativa presencia del bombo por su alineación y por supuesto captura las reflexiones de la sala. De esta manera, esta posición de micrófono le dará la profundidad necesaria a la sonoridad del instrumento para que se ubique fácilmente en la mezcla y sea el ‘glue’ o pegamento que unifique las capturas del instrumento realizadas con otro método.
Conclusión
El proceso de captura de una batería y su esencia como instrumento es muy relevante para la industria. Por ende, la búsqueda de nuevas técnicas y procesos que permitan obtener diferentes sonoridades es constante. Es usual sentir que al no contar con muchos recursos técnicos, esta exploración en las posibilidades sonoras en la captura instrumento se limita. Sin embargo este artículo nos demuestra que aun con un solo micrófono, siguen existiendo diferentes formas de plasmar el sonido de una batería en una grabación, por eso, es un invitación a probar cada una de las técnicas y por qué no, que sean punto de partida para experimentar y proponer nuevos sonidos o estilos que le den un sello a nuestro trabajo.
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